viernes, 3 de diciembre de 2010

Los secretos familiares

“Caín & Abel”, la novela de Telefé que no rinde pero interesa. Pese a que no alcanza los niveles de audiencia esperados, la historia producida por On Tv se muestra sólida y con destacadas actuaciones. En las últimas horas fue reconocida por el INADI.


Pensar que el nivel de rating de un programa de televisión está directamente relacionado a la calidad del mismo es una creencia tan simple como falsa. Existen en la televisión argentina una gran cantidad de ciclos rendidores que sin embargo carecen de un contenido interesante y a la inversa ocurre con producciones de muy buena calidad que no miden de la manera deseada.
Este es el caso de “Caín & Abel” (lunes a jueves a las 22.30, en Telefé), una telenovela sólida y con un reparto de primeras figuras que no supera los 10 puntos de rating según Ibope.
Sin lugar a dudas, esta situación no deja de sorprender porque realmente el argumento presenta matices interesantes. En cada capítulo uno puede sumergirse en diferentes historias que van desde el amor, la venganza, la traición hasta la violencia de género, siempre relatados con un ritmo que atrapa. De hecho en las últimas horas la ficción producida por On Tv fue declarada de interés público por el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) por su compromiso y tratamiento en esta temática.

ETERNO DILEMA
La trama gira alrededor de la familia de Eugenio (Luis Brandoni) y Consuelo Vedia (Virginia Lago). El un empresario de la construcción que tras su apariencia de hombre serio esconde todo tipo de canalladas. Ella, una ama de casa fría que se quiebra al ir conociendo los secretos de su marido y sus hijos. El resto del círculo lo completan Simón (Fabián Vena), Agustín (Joaquín Furriel), Beatriz (Mara Bestelli) y Santino (Juan Bautista Greppi), sus cuatro hijos.
Con ellos surgen historias diferentes. Por un lado el enfrentamiento que une desde hace años a Simón y Agustín, cuando ambos se enamoraron de Valentina (Vanesa González). Por el otro la realidad que le toca vivir a la £nica mujer de la familia, Beatriz, casada con Alfredo (Federico D'Elia), un hombre que la maltrata.
Además está Leonora (Julieta Cardinali), una chica que tras la desaparición de su hermano -asesinado por los hombres de Vedia y que también era hijo del patriarca- ingresa al círculo familiar y se enamora de Agustín, el bueno de esta tira.
Sólida por donde se la mire y convincente en todas sus actuaciones, “Caín & Abel” muestra que en la Argentina se pueden hacer ficciones que no tienen nada que envidiarle a las extranjeras. Un sólo punto le juega en contra a esta historia: su horario. De sus cuatro emisiones, tres compite directamente con el año más rendidor de Marcelo Tinelli. Y es ahí donde se explica que no está funcionando bien. Sin embargo catalogarla de fracaso, pese a que los números no la acompañan, sería caer en el eterno dilema.  ¿El rating puede reflejar la calidad de un ciclo? Este ejemplo demuestra claramente que esto no es así y que el público no siempre elige lo que es bueno.

Belén Herrera
Publicado en La Prensa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario